Por: Patricia Relats
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Tengo que confesar que ver una comedia así siempre me parece respirar aire fresco. De repente hay seres que parecen humanos en pantalla, hay problemas que parecen cercanos, manejan autos normales y pueden hasta limpiar sus piletas.
Con un ritmo brillantemente manejado, la película nos lleva a partir de un accidente en lancha cómo una familia tiene que decidirse a desconectar a la madre, la accidentada y los lazos que se van cortando o fortaleciendo.
El narrador es el personaje principal, encarnado por un fascinante Clooney, de los mejores que vi. Un tipo normal, sensato y que piensa poder manejar este caos que le está por explotar entre las manos con una nena de diez años que busca la atención agrediendo, una mayor emborrachándose y su mujer que gustaba ponerse en riesgo constantemente con deportes acuáticos.
¿Cómo se toma la decisión de desconectar a alguien? ¿Cómo se sostiene una catástrofe? ¿Cómo se entabla una relación que nunca se tuvo?
Por otro lado, unas tierras que heredaron Matt y sus primos terminará de dar una idea de familia, de qué es lo que anda por Hawai, qué es lo que significa esto de la familia y todo esto, mientras descubren que la futura desconectada tenía una vida paralela.
Realmente es una película tierna, bien apuntada a una búsqueda de equilibrio y paz, de amor y aceptación que es lo principal para poder estar unidos.
No es rosa, no tiene discursos grandilocuentes ni grandes revelaciones, simplemente intenta llegarnos…y lo logra.
Ficha técnica
Director: Alexander Payne
Guionista: Alexander Payne, Nat Faxon, Jim Rash, basada en la novela DeKaui Hart Hemmings
Productor: Jim Burke, Alexander Payne, Jim Taylor
Fotografía: Phedon Papamichael
Montaje: Kevin Tent
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